El sueño tangible

Salta de un lado a otro inagotable,
El sueño tangible con sus largas piernas y su particular forma de caminar.
No parece exhausto, por el contrario, parece que con el cansancio, va ganando un espacio único en la monotonía de cada día.

El sueño tangible,
Deslumbra en su sonrisa, una malévola y pícara invitación,
Los besos de su boca parecen dulce de alguna fruta exótica.
No quiere pero quiere trocar sus labios,
Porque como en cada suspiro se delatan,
Ambiciones mucho más fuertes,


Pero el sueño tangible,
Lo dice suave "estoy listo"
En la inseguridad aflora toda la ternura,
Nada puede contra eso,
Sueño tangible estás seguro?
Ya no tiritan sufiente las piernas,
Por tanto beso fugitivo,
Atrapado en la habitación.

Le dice sueño tangible,
Porque tantas veces en sus sueños lo vio,
No pudo darse cuenta hasta que sus manos curiosas,
Sintiendo su piel, y tocando su pelo,
Recordó la pasión que sólo sienten,
Los locos de remate.

No te sientas inexorable, sueño tangible,
Podrían haber otras manos escribiendo
Lo que se escribe hoy de ti.
Podría otra haberte dado la razón.
En los sueños estabas bien,
Pero estás entre la gente,
Actuando de alguna manera,
Como si no lo supieras.

Cómo si realmente no lo supieras,
Vas mostrando esa inocencia,
Como si fuera tan normal.
Con esa destreza tuya,
Con esa habilidad tuya,
Con esa increíble forma,
Tú no lo sabes, ella no lo sabe
Pero se aferra a tu cuello,
En un acto suicida.

Quizás no la reconoces en su cuerpo,
En su vida,
En su historia.
Ella ha perdido tantas cosas,
Y tantas cicatrices
Que puedes ver,
Son reflejo tangible,
De la espera eterna,
De qué algún día decidieras sueño tangible,
Salir al mundo,
Derrochando tanta ternura,
Tanta primera vez.

No tiritan las piernas por el cansancio,
Sino que es la emoción,
Venir de un sueño,
Con un atraso de diez años,
No es lo mismo que besar un mortal,
A alguien que viene desde el mundo,
Donde todo nace y muere.
Donde en ti despierta,
Sueño tangible,
La alegría de un nuevo día,
La delicia de un sueño,
que se puede morder.

Cítrico

Si a ti no te importa y a mi tampoco,
Dejemos los prejuicios de lado
Y deja que te huela el cuello.

Sexo

Mi sexo despegó de esta tierra, convertido en una especie de cosa extraña que se desprendió de mi cuerpo.
Como una luz fugitiva, como un sonido lejano.
Con una habilidad impresionante evadió y luchó, contra las normas de la moral y la ética.
Llegando al punto más álgido, donde todas las cosas desaparecen, ahí en ese momento, mi sexo vuelve irrespetuoso y abrupto,
a ocupar el lugar que nunca debió haber dejado,
A reescribir esa historia que nunca debió haber sido arrancada de ninguna página.
La historia que cuenta,
Cómo llegó mi sexo a convertirse en una ligera huella en algún distante y extraño lugar.

Octubre 22

Me gusta verte luchar y protestar por nuestros derechos, aunque no sea conmigo.

Opresor

No hay peor opresor que aquel que oprime sus sentimientos.

Amor revolucionario

Te dije que hiciéramos el amor y no la guerra.
Bueno, no estamos en guerra, pero tampoco hicimos el amor.

Arde Santiago

Seguramente estás viendo Santiago arder esta noche y a través de los pequeños espacios de tu ventana, se filtran diminutas partículas de lacrimógena a tu pieza.
Me pregunto si pensarás en mí.
Porque yo lo he hecho, curiosamente, mientras sonaba el helicoptero de los pacos sobrevolando por mi barrio, y mientras los milicos y pacos disparan libremente un poco más allá.
Pensé en ti, en este mismísimo momento y anhelé, que días antes cuando te insistí que me dieras una oportunidad de conocernos y pasarlo bien, me refería precisamente a habernos tomado de la mano y a haber caminado libremente por las marchas de la ciudad. Habiendo repudiado tanta injusticia y mala leche.

Pero tú no quisiste, y por eso hoy me encuentro aquí, asomada en mi ventana viendo Santiago arder, enviándote partículas de mi cariño, esperando que se mezclen con el humo que entra por tu ventana y entre a tu corazón.

Epitafio

Qué me importa lo mismo lo que piensen de mí.
Si estoy loca o estoy cuerda,
Si soy desenfrenada y desatada,
Si soy tonta o inteligente.
Al menos si muero, quiero que mi lápida diga:
"Aquí yace Marta Calderón,
Y se murió porque ya no quedan licores por beber,
Ni drogas que probar.
Murió porque hizo todo lo que quiso.
Murió de felicidad".

Como una araña

Tejiendo en un rincón,
Esperando el momento oportuno de lánzarte a mi red.
Así me he mantenido,
Con paciencia,
Esperando por ti,
A que un día quieras,
Doblegar tus ideologías y
Quebrantar tus razones,
A hacer irracionales hasta el último y pequeño beso,
Hasta la última y mojada lágrima.

No importa lo que piense el universo,
Si decides quedarte,
Cuál Penélope tejeré para ti,
Un nuevo inicio,
Una nueva vida,
Un nuevo corazón.

La culpa

Cómo podría culparte por nunca haberme entendido, si ni yo misma soy capaz de entenderme.
Pero si, te culpo, porque es necesario que haya un culpable y definitivamente no seré yo.

Lucky

Y que entiendas que el invierno pasará y el verano llegará tan rápido, que no lo notarás, salvo cuando se estén quemando las plantas de tus pies en el asfalto ardiente.
Y que también se irá el verano, como cada año sin poder poseerlo jamás.

Pero yo seguiré aquí, estando siempre en el mundo como un recuerdo,
Con mi risa escandalosa y mi estrepitosa forma de ser.
Con mi ambigüedad manifiesta,
Con mi terca y paciente espera,
Con mi arrebatada paz,
Con mi nunca comprendida armonía,
Con mi falta de amor propio, y con mi exceso de amor propio.
Con mi desgano cotidiano,
Con mi queja eterna y también con mi irrespetuosa forma de ser yo misma.

Si la vida me convierte en un recuerdo,
Me declaro afortunada.
No quiero desear nada,
Que no sea romper con todo.
Y que entiendas que el verano,
está a la vuelta de la esquina.

La gente está perdida

La gente está perdida.
Está perdida en su interior,
no puede contentar a su yo interno,
ni puede hacer feliz a su exterior.

La gente está perdida todo el tiempo,
en un abismo sin final,
en una duda eterna.
La gente está perdida de sí mismos y de otros también.

La gente no puede encontrarse.
La gente no quiere encontrarse.
Porque están muy perdidos,
y no saben qué hacer,
y no saben cómo hacer para que de un momento a otro, todos los desencuentros,
terminen en encuentros para siempre.
Hasta que ya nadie nunca se sienta perdido otra vez.

El cuerpo que yo habito

El cuerpo que yo habito, no es más que plástico moldeable.
Son metros de piel elástica y reseca.
Es el mismo cuerpo que he habitado, desde que soy en la tierra.
Un cuerpo mortal y sagaz, un cuerpo frío y caliente.

El cuerpo que yo habito, son membranas desmembradas, son lágrimas acumuladas, son llagas reventadas.

El cuerpo, mi cuerpo, es dolor y desencuentros, es amor y violencia, es paz y tempestad.
Este cuerpo que alimento,
Por años lleno de gozo,
Por momentos alegrías,
Por instantes penas,
Por siglos melancolía.

No es más que un envoltorio, una superficie llana y austera, un palacio pobre y corriente. Pero es mi cuerpo, el cuerpo que yo habito.

El cuerpo que se destruye y el que se cura,
El cuerpo de otros cuerpos, y también de sí mismo.

Es la agonía placentera y también es la muerte misma, resplandeciente y lumoniosa de la blanca piel que lo recubre.

Es un cuerpo, igual a muchos cuerpos,
Pero singular y particular,
Pues se constituye de muchas formas, se transforma y se deforma, pero nunca deja, de ser el cuerpo que yo habito.

El desierto

El desierto y yo fuimos uno, y nos teñimos en la piel con recuerdos inmemorables.
El desierto tocó desde el interior y  yo le toqué con la punta de los dedos, simulando una cálida lluvia, un día de verano.

Confusión

Me disfrazo de figuras geométricas, para no ser tan compleja, para que parezca que con fórmulas se define mi estilo.
Soy cuadrado, triángulo y círculo, los tres al mismo tiempo.
La gente se confunde, vomitan números por montón, de sus lenguas venenosas.
No creo en las personas, no creo en las fórmulas, no existe la solución.
Yo me río desde lo más profundo, desde un rincón apartado, donde la gente cree que ve, sólo formas geométricas tontas.
La sangre se exige por doquier y yo sólo río en una de mis muchas puntas, en lo infinito de un círculo, en lo impredecible de una mirada.
La sangre corre rumbo al sol, mientras me congelo para permanecer sujeta a mis espacios, a mis recovecos. Yo no lloro, sólo que mis ojos conocen la verdad de su belleza y es malo.
Ni los mil millones de ojos que ven pueden comprender la sutileza que existe en el vuelo de una mosca callejera.
Me hablan de simpleza?
Yo vivo en un cuadrado y dentro todo es cuadrado, yo vivo en una casita de playa al medio de la arena. Simple, no?
Y la gente se confunde.

Elige-me

Elige.
Elige porque puedes hacerlo,
Elige porque hay opciones,
Elige tu ropa y tu calzado,
Elige tus colores y también tus sabores,
Elige a dios,
O elige al diablo,
Elige, pero elige-me.

Elige invitarme y llamarme si deseas hacerlo.
Elige, mi cuerpo sobre otros cuerpos y mis manos por sobre otras manos.
Elígeme, como si ya no pudieras hacerlo nunca.
Elige mis besos  sobre otros besos.
Elígeme como la manzana del canasto o como una paja en un pajar.
Pero elige, elige lo inseguro y lo inestable.
Elige volar.

La luz

La luz en mí se apaga y de a poco me vuelvo gris y de a poco me vuelvo negro.
Me sumerjo en mi interior y lloro una pena grande que se hace pequeña al pasar el tiempo o se hace inmensa al pasar las horas.

Insomnio

Las únicas veces que dormía bien, eran cuando tomaba copete.

Desvío

De cualquier manera siempre hay un desvío.
Un desvarío que me lleva por límites insospechados,
O quizá nunca ha habido un límite o algo que se le parezca.

Carta n°1

Flaca :

Te escribo aquí, primero porque sé que algún día leerás esto y todo lo que te he escrito y te escribiré. Y segundo, porque quiero que todo el mundo sepa, que yo a ti te amo.

Faltan días de que yo tenga que volver a trabajar y tú vayas por primera vez a la sala cuna. A pasar días y horas, con otra gente, con otros niños. Días y horas que hasta hoy has compartido única y exclusivamente conmigo.
Me conoces y te conozco tan bien, pero nunca acabo de hacerlo, eres cada día un mundo nuevo para descubrir.
Me has enseñado tantas cosas, flaca, tantas pero tantas cosas. Yo te juro que hasta verte, no sabía lo que era vivir. Era una persona que vivía una vida vacía y oscura, vivía por vivir. Sin sentido casi todo el tiempo, trabajaba porque había que trabajar, porque era rico tener plata y gastarla en cuanta cosa se te ocurriera, que comía porque había que comer o que dormía porque había que dormir. Pero tú, flaquita mía, viniste a darle sentido a todo linda, a la vida, a la familia y a mi misma. Porque el día en que tú naciste, nació en mi una nueva mujer, una mujer valiente, fuerte, empoderada y guerrera. Una mujer que es capaz de dar la vida y matar, si es necesario, por ti. Por ti, que eres mi propio ser, y mi propia razón de vivir.
Al o a la que te toque un pelo hija mía, va a ver su vida pasar en un segundo, y ese segundo, se lo va a pasar pidiendo clemencia. Te lo juro.

Me pone ansiosa, la idea de no estar juntas. Me asusta, esa es la verdad. He tratado de tomarlo con toda la paz del mundo, pero Cele, hay gente tan mala. El tiempo en que tú viniste a darle alegría a mi mundo, el mundo a mi alrededor parece sumirse en un mar de gente mala, hombres, mujeres y niños malos. Y yo que te he dado tanto amor.
Te he dado amor desde que abres tus ojitos en la mañana y desde que te quedas dormida junto a tu tetita en la noche. ¿Cómo podré defenderte? ¿Cómo podré cuidarte?.
Me dan tantas ganas de quedarme junto a ti por siempre, pero esto es casi como una despedida, porque el día en que entres a la sala cuna, nunca volveremos a pasar tanto tiempo juntas como lo hemos pasado hasta ahora, casi a días de cumplir 1 año, 365 días conociéndonos y reconociéndonos tú y yo.
Sólo quiero para ti, lo mejor, y nada más que lo mejor.
Que yo y tu papá, seamos capaces de protegerte de este mundo de mierda, porque los dos tenemos miedo hija, tenemos miedo, de esta sociedad y la mierda en que se ha convertido y al mismo tiempo de no negarte la libertad que te mereces. De darte herramientas para defenderte y valor para enfrentar a cualquiera que quiera hacerte daño. Que nadie se atreva siquiera a tocarte, con la punta de los dedos.

Te amo por sobre todas las cosas y por sobre todas las personas. Desde que tú llegaste, aprendí a amarme a mí misma.
Eres el pequeño y más maravilloso milagro que me ha ocurrido, porque tú llegaste a salvarme de vivir en una vida miserable y egoísta, porque le das valor y sentido a todo.

Mi hija, mi bebé por siempre, la que creció en mis entrañas y que siempre llevaré marcada en mi piel y en mi corazón. Mi razón de vivir.

Pd: siempre salen borrosas tus fotos porque no quedas tranquila ni un segundo.

Armas

Tengo todo tipo de armas, para causar todo tipo de heridas y dolores.

Libertad

Me gusta la gente que viste de libertad, le sale por los poros y además quiere volar.
Me gusta la gente sin miedo y sin tapujos
Me gusta la gente que le gusto y a la que no le gusto, también.
Quiero besar la libertad, de todos, todas y todes.

Orgasmos

Salí de mi casa, en dirección a juntarme con un "onvre" que dijo que me deseaba,
Y desde que lo dijo, también lo deseaba yo.

Mientras iba en dirección un mensaje repentino con alguna excusa barata.
Tuvo miedo, lo sé.
Pero oye, no nos íbamos casar.

Seguí mi ruta y hablé con unos amigos,
Nos juntamos por ahí,
Fumamos, hablamos y reímos.

No pienso en el por qué de su arrepentimiento,
Doy gracias a su pavor.

Disfruté tanto como podía disfrutar,
No lo sabía entonces, pero tuve orgasmos.
Orgasmos reales, volátiles y llenos de amor.

Locura y demencia

Se tocan las puertas, todas.
A la espera de que pueda un día tocar la suerte de encontrar a alguien como tú.
Con tu locura y tu demencia,
Con tu desvarío sensorial y verborrea emocional.

Puede que toque la suerte o la mala suerte, de conocer a alguien como tú
Alguien que entre imperialismo y materialismo, sólo desea volver a ser el niño que una vez arrebataron, que te abracen fuerte mientras respiras agitadamente.

No te conozco, pero te extraño.

Extraño cuando jugábamos a ignorarnos, porque realmente ninguno podía ganar.
Extraño tu loca forma de mirarme y tu demente forma de explicarme todo con tanta sutileza, para evitar malos entendidos.
Te extraño con los buenos y malos momentos, y sobre todo con la irracional forma de comportarnos.
Extraño las cosas que nunca hicimos, y definitivamente  extraño las cosas que nunca se harán.

No te conozco, pero te extraño.

Te vi una vez, en un sueño.
Venías tarareando una canción de Oasis.
Yo no te lo dije, pero lo supe cuando te oí.
Era Songbird y tú la cantabas para mí.
Tú tampoco lo dijiste, pero lo supe.
Nos miramos y simplemente lo sabíamos
"los mejores días están por venir"

Pero lo apagamos como un cigarrillo en un cenicero. Tanto fuego aplastado por la ansiedad.
Somos tontos.
Tontos locos y dementes.
Pero ya no nos tenemos.
Nunca nos tuvimos.

Yo no te conozco, pero te extraño.

La inconstante

Igual me voy, siempre me voy.
Por más y más que repita que no me iré termino siempre igual yéndome en cualquier dirección.

Correcto

Si está bien, y es lo correcto.
¿Por qué se siente como si fuera incorrecto?
Si nos dejamos de ver, para dejar de sentir.
¿Qué hago con esto?
Si dejamos de hablar, para evitar confusiones.
¿Qué es lo que me tiene tan confundida?
Si estaba tan segura.
¿Por qué lo dudo?

Dijiste que todo estaría bien, aún espero.