Escribo porque no sé permanecer en silencio. Porque la palabra es mi carne y mi condena, y porque a veces la única manera de no enloquecer es dejar que la locura hable por mí. No busco respuestas, solo temperatura. Soy Laura Desamparada: lo que queda cuando el alma hierve demasiado.

miércoles, 9 de enero de 2008

II

La última cosa que imaginas sentada al fondo del tumulto,
a la derecha de la gente, extendiendote la mano.
Soy yo.

1 comentario:

jomacargo dijo...

maldicion... grr, siempre estoy en esas situaciones y puro webiando en vez de ponerme de pie e ir y dar la mano directamente... y de puro aweonao no'mas jojojo

en fin... asi es la laife, igual me la paso bien apesar de webadas asi...


cuidate mucho mujer y practica!