Algo se está ahogando,
No creo que sea necesario que despierte,
No quiero salir,
Quiero irme de aquí,
Pero sin moverme,
Puede parecer idiota,
Tal vez moriré así.
Puedes darme mucho,
Incluso la misma vida,
Pero no quieras levantarme,
Yo te ofrezco algo,
Acariciarte, ternura, tu sabes.
Tal vez puedo perder el tiempo,
Tejiendo, bordando, zurciendo,
Pero no me levantes,
Si quieres estár conmigo,
¿No te sería más fácil acostarte a mi lado?
2 comentarios:
hola señorita, primero que nada. con respecto a tu blog de poesia, tengo varias observaciones de tu obra, como poeta mas experimentado y manipulador del lenguaje. lo primero. falta mayor grado de exteriorizacion en la lengua, es decir sobra el YO, esdemasiado activo y eso siempre otorga lo que se llama el tono "carmínico" o de cancion, propio de la poesia del siglo de oro y XVIII. te recomiendo para esto leer a un poeta nicaranguense llamado Ernesto Cardenal, que es "exteriorista". A su vez creo que eres atiborrante en el tema de la muerte, evocas las mismas imagenes y los mismos medios retoricos, para eso creo que simplemente puedes recordar cuando en una fiesta te comes un completo, es super agradable, eso tambien es parte del acto poetico, la vision de la poesia como un acto "oscuro" y tenebroso es propio del parnasianismno de la primera mitad del siglo XIX. con respecto a tu identidad como poeta "mujer", te recomiendo a 3 poetas de nuestro continente: a blanca varella del peru, a Alejandra pizarnik de argentina y a Stella Diaz de chile, que tuvo un noviazgo allá por los 50 con Jodorowski y era amiga intima de enirique lihn...bueno eso-....adios-....ojalá te sirva para escribir mejor
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