Escribo porque no sé permanecer en silencio. Porque la palabra es mi carne y mi condena, y porque a veces la única manera de no enloquecer es dejar que la locura hable por mí. No busco respuestas, solo temperatura. Soy Laura Desamparada: lo que queda cuando el alma hierve demasiado.

jueves, 29 de abril de 2021

Felicidad

Me obsesiona la idea de conocer la felicidad. 

Me trastorna, me enloquece.

Hace que llore sin motivos pensando que alguna vez fui feliz, o que tal vez nunca lo fui.

Escribí un poco acerca de cómo se sentía, luego lo puse en duda, porque me resistía a comprenderlo. Leía mis escritos, como ajenos. Yo nunca había sido feliz. 

Dentro de la historia de cada agonía hay mariposas revoloteando, que dejan un mapa de la ciudad dibujado en particulas de polen.

Las manos están cansadas de tanto escribir acerca de algo que no perdura, y se aferran a cada letra mientras existan las palabras. 

No debería ser normal deprimirse mientras se espera la llegada de la felicidad.